19 de junio de 2013

Maestros

Comenzando desde arriba hay un fuego, o tal vez sean varios,
lo sigue una autopista infinita y una casa tomada.
Continuando hacia la derecha
hay una rayuela que se debate entre dos universos,
dos cuentos con anagramas,
y un perseguido que toca jazz hace tiempo desde el cielo.

En el segundo estante hay un pintor que pinta su propio túnel
rodeado a un lado de hombres y de engranajes
-son demasiados, no puedo contarlos-
y al otro por la muerte, que espera antes de que llegue el fin,
hay también un resistidor que aún se resiste a las generaciones perdidas.